martes, 28 de abril de 2009

QUE LE DEBO AL HOSPITAL, QUE LE DEBO A MI MAESTRO...

Pues esa es una de las preguntas que siempre se me cruza por la mente.
Tener a mi lado a una persona con mente abierta, revisar conceptos de justicia, saber que se me escucha con atención, es creer que uno progresa en este camino de la medicina. Que hace que un docente pueda ser evaluado y lo mas importante que hace que pueda ser considerado como tal. Este es un tema del que tengo muy poca experiencia.
No se si se entendió todo lo que escribo. Tampoco importa…Lo que me llevo esta noche como cierre del día tiene que ver con mis deudas de tiempo..Mis deudas conmigo, y con la forma en que quiero vivir y -de alguna manera- perdurar en el recuerdo de mis maestros.
Aquí unos preceptos que los he modificado, y que todos deberíamos cumplirlos. (Espero……. que este conocimiento sea de TODOS)
1. La enfermedad decide la vida o la muerte en un sólo golpe; así, como discípulo debo seguir cuidadosamente la enseñanza de mi maestro y no competir para ver quién es el más fuerte.
2. La práctica diaria es la vía que enseña cómo debe uno actuar con varios problemas. Como discípulo debo entrenarme para estar alerta no sólo de frente, sino por todos los lados y por la espalda.
3. La misma debería efectuarse siempre en un ambiente agradable y festivo. GRACIAS POR HACER QUE SUCEDA DE ESA FORMA.
4. Mi maestro me enseña sólo un pequeño aspecto del arte. Sus versátiles aplicaciones deben ser descubiertas por mi a través de la práctica, entrenamiento, y lectura incesante.
5. La inclinación hacia una actividad empieza con la curiosidad y luego con la pasión y el interés que debe crecer día a día. (SUCEDE SIEMPRE QUE HAYA QUIEN TE ESTIMULE).
6. El propósito en común es entrenar la mente y el cuerpo y crear gente sincera y cabal. Ya que todas las técnicas y conocimientos brindados han de transmitirse persona a persona, el mismo no debe deformarse ni perderse por ningún motivo, el discípulo es el portador de esa antorcha y la ha de pasar a quienes lo sigan y así sucesivamente, no las reveles fortuitamente a otros, porque esto podría conducir a que fueran utilizadas por alguien a quien no le interesen, y en ese momento se habrán perdido para siempre.
Así pues le debo mucho a mi maestro O tal vez nada.

En mi caso mucho, y debo decirlo.
Todo depende de cómo se lo mire y como se lo viva, también a la casita donde eso sucede el Hospital.

Con el verdadero maestro el discípulo aprende a aprender, no a recordar y obedecer. La compañía del noble, no modela sino que libera.


Nisargadatta
Excelente maestro es aquel que, enseñando poco, hace nacer en el alumno un gran deseo de aprender. Arturo Graf
Solo hay una manera de ser maestro: ser discípulo de sí mismo. José Camón Aznar
Es detestable esa avaricia espiritual que tienen los que, sabiendo algo, no procuran la transmisión de esos conocimientos.
Miguel de Unamuno

Los discípulos son la biografía del maestro.
Domingo Faustino Sarmiento


Les guardo mucho respeto a mis profesores, pero les debo las gracias infinitas a mis maestros.

Esto a propósito del día del Maestro.
Que como siempre me gusta festejar estas fechas atrasado. Ya cuando pasa la novelería.

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